Existe una suposición cuya afirmación es que entre más pequeño sea un instrumento, más agudo es su sonido y entre más grande, más grave.
Esto sucede al menos con los instrumentos de cuerda frotada. Empezando de menor a mayor con el violín, la viola, el violonchelo y el contrabajo.
Y en instrumentos de cuerda pulsada como la guitarra en todas sus versiones y en el laúd encontramos tonos graves, medios y agudos, aunque en sus derivaciones como la mandolina, la bandurria y los requintos solo existen los agudos, en el tres cubano. el tiple colombiano y el banjo, tanto agudos como medios, para graves, el guitarrón y los bajos. y ya si queremos adentrarnos en los medios, habría que recurrir a instrumentos de acompañamiento como el charango, el cuatro venezolano, el timple canario, el cavaquinho, la vihuela, la jarana jarocha y sobre todo, el ukelele, de quién haré mayor énfasis en esta entrada.
Cuando decimos ukelele, solemos decir Hawái y Tahití, porque es el instrumento clave para la música de ambas naciones, pero en realidad es un instrumento proveniente de Europa.
Remontándonos a la historia, en el siglo XVIII, las derivaciones de la guitarra estaban llegando a este mundo buscando que los músicos marineros tuvieran mayor oportunidad de ejecutar su música sin necesidad de recurrir a la guitarra como hoy en día la conocemos.
La más dada a la tarea de todas estas derivaciones, ha sido el cavaquinho, que aunque es muy popular en la Samba y en toda la Música Popular Brasileña, sus orígenes se remontan a Portugal. Llega el año 1879 y es cuando cuatro migrantes portugueses llegan a Hawái para dedicarse a la fabricación de instrumentos.
Gracias a esto, nació lo que podría haber sido el cavaquinho hawaiano, pero nosotros lo conocemos como Ukelele.
A mediados de la década de 1910, el ukelele empezaba a cobrar vida, para los años 30 hace su aparición en la música popular, incluso algunas partituras para piano, contenían acordes para este instrumento.
Se dice que cuando se asociaba con melodías oscuras y con el Jazz, iba perdiendo el auge que tenía, pero el año 1945, marcó el renacimiento de la pequeña guitarra tras la culminación de la Segunda Guerra Mundial.
Desde el 2000 hasta estos días, la manía del sonido acústico hace que en general todos los instrumentos cordófonos tengan su lugar.
Esto demuestra que un instrumento como el ukelele, es capaz de demostrar que en el pasado existen claves para poder llegar al futuro.
Y si todavía dudan de esto, chequen la presencia de la pequeña guitarra y la denominada "Lap Steel Guitar" en una obra clave de la música mexicana, sobre todo en las primeras notas:
